Cita

Bridget Jones

Nota mental: Ver El diario de Bridget Jones es una idea terriblemente mala, sobre todo con chocolate, gripe y 5 kilos de más. Ahora siento que los años que me separan de los 30 se hacen enanos y ya soy una solterona a la que sólo le faltan gatos.

Minientrada

Primera salida

Bien, esta noche saldré con unos amigos a tomar algo y etc… y aquí estoy, sentada frente a mi Mac, en pijama, con un pedazo de torta de chocolate y mi oso de peluche terriblemente asustada, y es que después de una relación de casi 4 años no tengo ni idea de adonde se sale, o que me pongo, no tengo nada brillante en mi closet, excepto vestidos de coctel, a qué hora se sale, dios, no tengo idea. No estoy lista para salir con nadie todavía, pero si quiero bailar y tomar un trago bueno con amigos. Me siento perdida. ¿Ustedes como volvieron a «reinsertarse» en la nightlife luego de terminar? ¿qué demonios me pongo? Veo videos de Taylor Swift a ver si me da alguna idea y pienso que no tengo nada brillante o con lentejuelas. Bueno aqui me quedo estresandome.

Jo.

50 Sombras de Grey y el regreso a casa

He vuelto a casa. Cuando empecé el blog estaba en casa de mi mamá y ahora ya he vuelto a casa. No dejo de pensar que definitivamente necesito un perro o algo que me salude al llegar a casa porque algunos días la soledad no me parece tan liberadora como otros. Todo está empacado pues al irme dejé encargado que fumigaran el departamento porque le tengo terror a las arañas y prefiero intoxicarme un poquito a toparme con alguna. Ya llevo casi una semana aquí y aun no he desempacado nada, sigo usando la ropa de la maleta y sacando pieza por pieza alguna cosa que se me antoja ponerme de las bolsas pre fumigación. Dios que perezosa soy. Hay días que no me nace ni salir de la cama, imagínense sacar fuerzas para volver a colocar toda la ropa en el closet y ordenar nuevamente todos mis libros y papeles ¿ustedes son de las ordenadoras compulsivas cuando están tristes o de las que con las justas salen de la cama cada mañana?

Estoy releyendo algunas cosas que me gustaron de pequeña para detener mi mente de seguir repasando cosas de la relación, ahora leo El Conde de Montecristo. Pero hay algo que ha captado mi atención: 50 Sombras de Grey. Llego algo tarde al boom del libro, lo sé, pero es que no me llamó la atención hasta que escuché que había roto los records de ventas de Harry Potter y como toda potterfan, no pude creerlo. Así que aquí me tienen, buscando la descarga más barata del libro solo para curiosear, aunque la literatura erótica y rosa no sea ni de lejos mi favorita. Quienes hayan leído el libro disculpen la vaguedad de mis observaciones porque voy a confesar que más que leerlo por completo hice un zapping ansioso y desordenado entre varios pedazos del libro. Cómo una lectora muy experimentada debo decir que la verdad la prosa no es nada sorprendente y definitivamente esta obra no entrará en la historia de la literatura. Pero hay algo que no puedo negar y es la fascinación por esta relación compleja y bizarra que tiene Anastasia Steel con Grey, es, en efecto, una relación arquetípica potenciada por el fuerte contenido explícito de la novela: El de una mujer inocente, indefensa por lo tanto, frente a un hombre imponente y dominante que la hace ingresar en un mundo donde él es el amo. Como si la caperucita roja decidiera dejarse comer por el lobo, gustosa y presta. Después de tanto movimiento por la liberación femenina me llama la atención que el libro erótico más descargado de la década sea una oda a una relación de dominación. Claro, sé que la comunidad BDSM tiene relaciones de dominación y sumisión, pero esas son consentidas y además se basan más en confianza que en verdadera dominación. Pero Ana Steel no tiene idea de adonde se mete, y la relación de dominación no es solo sexual sino emocional, con él comportándose como un stalker todo el tiempo. Es como si el Síndrome de Estocolmo sea la nueva moda en relaciones emocionales. Y me pregunto ¿qué dice eso de lo que esperamos las mujeres de las relaciones? podemos ver el lado bueno: queremos un hombre dominante, que haga su mundo girar a nuestro alrededor y que se encargue de más o menos todo (porque si mal no me equivoco Grey luego de casarse le pide a Ana que deje de trabajar); o podemos ver el lado bizarro: que una relación de dominación, abusiva física y emocionalmente, en donde no somos más que un juguete con algo de conciencia y memoria, es aceptable.

 

Si es que algo he aprendido de mis relaciones pasadas es que darse cuenta de que una relación es tóxica y salir de ella es una de las cosas más difíciles de hacer. Es como bucear en un pantano, no puedes ver demasiado así que asumes que así es como debe ser, pero cuando por casualidad sales a la superficie te das cuenta del lugar horrible en el que estabas. Por eso les invito a hacer un examen conmigo, ¿cuantas de las relaciones que han tenido han sido más tóxicas que buenas? ¿han sido la mamá de vuestros exs? ¿eran más las lágrimas que las sonrisas? ¿esas personas las limitaban o las ayudaban a realizar sus metas y sueños? Cuando asumes una relación seria debes estar dispuesto a negociar y modificar algunas cosas para que el proyecto el común triunfe, pero renunciar a tu individualidad, a tus metas y a lo que te hace feliz, está por completo fuera de los límites.


Jo.

La boda.

Y llegó la boda. Fue hermosa, no atrape el ramo pero bailé hasta que los tacos me hicieron daño, es decir, todo perfecto. La novia es una amiga de la infancia de esas que son casi familia, de esas con las que puedes no hablar por meses y cuando por fin la ves parece que no hubiera pasado ni un día porque la conversación fluye y las cosas siguen donde las dejaste. Por eso fue más especial. Por eso y porque cuando todas las damas estaban dentro de la iglesia esperando a la novia, cuando su mamá ya estaba dentro, la única a su lado era yo. Cargandole el vestido y la cola, intentando que no se tropezara con los tacos y los nervios; entonces, casi ya frente a la puerta, la novia se detuvo en seco y me dijo «Jo, voy a vomitar, estoy demasiado nerviosa» y yo que estaba haciendo lo posible por aguantarme las lagrimas de lo linda que se veía y no estamparle un beso en el velo olvidando por completo mi lápiz labial, me quedé en blanco, ¿qué se dice entonces? solo se me ocurrió hacerle un chiste y decirle que si ella vomitaba, vomitaba yo también en solidaridad, que se relajara, que todo saldría bien, entonces pasó algo mágico, la novia dijo «quiero ver a Sebastian (el novio), solo quiero verlo», entonces respondí, del fondo de mi alma, «entonces entra, es solo ese pasillo, y estarás con él, estarás con él para toda la vida». La fuerza instantánea, la tranquilidad que vi en los ojos de esta fantástica mujer me hizo entender algo maravilloso, y quiero que lo entiendan conmigo: Exactamente de eso se trata el matrimonio, así es como se elige a la persona con la que quieres pasar toda la vida, no es quien quede mejor en las fotos o con quien no pelees nunca, es esa persona, ese único ser, que en el momento más feliz y en el momento más estresante, sea el único rostro que necesitas ver para seguir adelante. La novia, mi amiga, mi hermana, pudo pedirme a su madre, a su padre, a alguna de sus tías o sus amigas, pero eligió exactamente a quien debía, a ese hombre parado en el altar, esperándola con una sonrisa y una broma tonta sobre lo nervioso que le había puesto su demora.

Ahora tengo un nuevo hogar en lugar de solo una amiga, y eso es magnifico. Creo que sabes que alguien hace lo correcto cuando el único deseo que puedes pedir para su matrimonio es que sigan exactamente igual que ahora, así de enamorados, exactamente así.

Jo.

Bodas y «I will survive»

Mi amiga de la infancia se casa. Nuestras madres fueron a la universidad juntas, mi mamá estaba en la fiesta de cumpleaños de su mamá cuando entro en labor de parto, y somos amigas desde que tengo memoria. Ahora, de pronto, se casa. Antes de conocer al novio dudaba del buen juicio de mi amiga, pensaba que era demasiado pronto para casarse, aun la recordaba yendo a fiestas de quince y pidiéndome que prenda la luz de su enorme casa cuando estábamos solas, para mi aun éramos una niñas. Entonces tuve que organizar la despedida de soltera y conocí al novio al hacer un video sorpresa, todas mis dudas se disiparon: Era el hombre más enamorado que había conocido, dulce, gracioso, romántico, siempre pensando en lo que le gustaría a su novia y muerto de ganas de casarse. Estoy muy feliz por ella pero no puedo evitar dos tipos de bajones, uno en el que siento que una era termina por completo y este paso nos hace crecer a las dos de golpe, y el típico «este ha sido el peor momento para terminar de toda mi vida».

Ya he pasado los días de gracia ya fuerza se me esta acabando, estoy empezando a ver obsesivamente nuestras fotos y releer los dos últimos mails que nos mandamos hasta el punto que me los sé de memoria. Hoy, volviendo del ensayo para la boda en un carro con todas las damas, me sentí enormemente desamparada, imaginando como hubiera sido mi boda de haber continuado en la relación, las cosas fantásticas que haríamos porque encajamos tan bien, y los caprichos raros que me dejaría cumplir, y cuando estaba a punto de gritarle a mi amiga y todas las damas de honor que acababa de terminar una relación de tres años y solo quería llorar y apagar esa estúpida música romántica, un milagro salió del usb que el novio nos había dejado en el auto: I will survive. Para completar la perfecta coincidencia, a mi canto en murmullo se fueron sumando una a una las damas, hasta que de pronto, todas cantábamos a gritos acompañando (bastante mal) la fantástica voz de Gloria Gaynor. Sinceramente agradezco a todos los dioses disponibles por esa señal mágica.

Jo.

Weddings and «I will survive»

My childhood friend get married this week. Our mothers were to college together, mi mom was in her moms birthday party when she went in labor of me. We are friends since i can recall, and now, suddenly, she’s getting married. Before I met the groom I doubted the good judgement of my friend, i thought it was to soon to get married, i could still remember her going to sweet sixteens and asking me to turn on the lights when we were alone in her big house, in my head, we were still little girls. Then I spend more time with the fiancé when we made a surprise video for her bachelorette party (which I organized instead of the sister she never had) and all my doubts were gone: He was the men more in love that i’ve met, sweet, funny, romantic, always thinking on what would my friend want and excited to get married. I’m very happy for my friend, nevertheless I can’t help but having two flashes of sadness, one that I feel that a hole era ends up and this step she’s taking makes us both grown up suddenly; the other, the typical «i’m so lonely, this was the worts time to break up».

Coincidentally my free days have ended and my strength is gone, I’m starting to watch obsessively our pictures and reread our two last mails at the point I’ve already know memorized them. So today me and the bridesmaids were coming back from the rehearsal dinner , all together in a van, and i felt so lonely and helpless, imagining how would my wedding could have been if I wouldn’t break up, all the fantastic things we’ll do because we were such a perfect match, all the little whims he’ll let me fulfill, and when i was just about to scream «i have just ended a three year relationship, please turn of that stupid romantic music» to the bride and her maids, a miracle came out of the USB the groom have let us in the car: I will survive. To complete the fantastic accident, to my singing murmur the voices of the bridesmaids were adding slowly, until all of us were singing loudly accompanying (pretty bad) the fantastic voice of Gloria Gaynor. I thank all the gods for that magical signal.

Jo.

Celos y libertad

No soy demasiado celosa, es decir, sí, siento celos, pero los míos tienen una construcción particular que los hacen al mismo tiempo más simples y más complejos: Más que duda eran temor a que alguien o la soledad me reemplazaran. Es curioso como algunos lugares que jamás hemos pisado se sienten tan naturales, como parte de una vida pasada, como llamando alguna parte precisamente en el centro de nuestras entrañas. Para mi ese lugar era Nueva York. Noche tras noche imaginaba un lugar oscuro, natural, diferente, lleno de jazz y arte, con lo necesario a cualquier hora y muchos sueños intentando hacerse realidad y cerraba los ojos para disfrutar de aquel lugar al que aun no había ido. Luego también, por supuesto, pensaba en él. Y me dejaba disfrutar de ese momento raro de soledad para volver incluso más enamorada a él. Pero la verdad es que tenía miedo, miedo de encontrarme demasiado lejos para volver o miedo de que él se fuera demasiado lejos, en su trabajo, sus juegos, sus propios placeres, que disfrutara más de su soledad que de mi y yo, simplemente, ya no encajara en su vida. Nunca llegué a convencerme del todo de que encajaba en su vida. Siempre me quedaba la duda de si era suficientemente bonita, lista, bien vestida, elegante o madura, entonces me ponía a ver con cierta obsesión sus fotos, las comparaba con las mias, pensaba en sus respuestas, ¿Qué pensarían sus amigos y amigas? ¿Esas personas seguían persiguiéndole sin importar que yo estaba en su vida? Pese a que yo ya no podía recordar como se sentía buscar una pareja, coquetear.

Esos eran mis celos, miedo de no ser suficiente, miedo de que no vuelva o que yo no pueda volver. No conozco muy bien la sensación de las que todas mis amigas de hablan de dudar de sus parejas y querer asesinar a todas las mujeres que se les acercan. Para mi esa duda era imposible porque a penas existía la relación debía desaparecer. Pero si ese temor de no volver a encontrarnos. Ya no es solo el hombre el que tiene miedo al compromiso ¿que pasa cuando dos personas que disfrutan tanto de su libertad se enamoran? Ahora que las mujeres tenemos vidas que no solo giran alrededor de una familia ¿cuan dispuestas estamos a renunciar a nuestra propia libertad por… amor? Ahora que lo pienso, mientras llueve un diluvio al otro lado de mi ventana, se me ocurre que quizás el verdadero amor es precisamente no tener miedo de alejarse o estar solo pues volver al otro es tan natural como volver al hogar. Claro que eso no significa que demos por sentado el amor y el romance, pero es que moverse con temor, como perros con correa, no puede ser la forma adecuada de vivir.

Jo.

Jealousy and freedom

I’ve never been jealous, i mean, yes, but mine have a rather particular construction that make then, at the same time, simpler and complex: Rather tan doubt, they were fear that someone else or solitude could replace me. Is funny how some places we’ve never been to feels so natural, like from a past life, like waking up something in the middle of our guts. For me that place was New York. Night after night i let myself imagine a dark place, natural, different, full of jazz and art, with everything at any hour, the city that never sleeps, i’ve closed my eyes to enjoy that place in my mind. Then, of course, i thought about him. I let myself enjoy that rare moment of solitude to go back even more in love to him. But the true was that i was afraid, afraid of finding me to far away to come back or that he could get lost in his work, his games, his own pleasures, that he could enjoy to much his own solitude and that i wouldn’t fit in his life anymore. I was never completely convinced that i fit well in his life. The doubt, if i was pretty enough, smart enough, elegant enough, then i used to saw his pictures and compared them to mine, i thought on his answers, what would his friends think about me? what about that girls that keep stalking him even to though we were together for two years? And I couldn’t even remembered the last time I flirt with someone.

Those were my jealous, fear of not being enough, fear of not coming back. I don’t really know that feeling of doubt that my girl friends tell me about, that feeling of wanting to kill every girl that come close to their partners. For me that doubt is incompatible with a relationship, the moment it appears, the relationship has to end. But that fear of not coming back? Now is not only the men that’s afraid of commitment, what happens when to people that enjoy so much their freedom fall in love? Nowadays that women have lives that no longer gravitated around a men and family, how willing are we lo let go our freedom for… love? Is it necessary? I want to think that maybe real love means precisely not being afraid of getting away, knowing that, even enjoying solitude, going back to him or her is as natural as going back to home.Of course that doesn’t mean that we should take for granted tenderness and romance, but going through life like dogs on a leash can not be the right way to live.

Jo.

Annie Hall y el amor que quiero

Hoy vi de nuevo Annie Hall después de algunos años. Era la película favorita de uno de mis ex, aun lo recuerdo rogándome que la veamos juntos, explicándome lo linda y especial que era. Ahora estaba en el cine, reposición de cine arte que debe ser parte de una campaña para subir el valor de marca o la fidelidad, o lo que sea que le llamen ahora a esas cosas los publicistas, aquí lo único importante es que estaba en el cine. Cuando la vi, hace años, solo pude ver una comedia muy inteligente de un hombre bastante neurótico y una mujer extraña pero divertida. Me enamoré del personaje de Allen, naturalmente me sentía identificada con sus comentarios agridulces, su visión pesimista de la vida pero siempre al borde de una carcajada. No note nada, nada de la magia. Es extraño y hermoso como uno puede crecer tanto en solo dos años, cambiar por completo de paradigmas, reformular las cosas que antes pensábamos faros inexorables de nuestra existencia.

Solía temerle a la soledad, despreciar las relaciones fuerte interpersonales pues sólo lograban reflejar con más potencia el miedo a la soledad repentina y impuesta. Ese es mi modo de llamarla, soledad impuesta. Alguna vez han pasado todo un día cotidiano y normal (me refiero a salir a la calle, ir al trabajo, comer, volver a casa, etc) casi sin pronunciar una sola palabra, tanto que al momento en el que llega la noche parece que los labios se separan con legaña, la voz suena ajena, artificial? Pues es a eso a lo que yo llamo soledad impuesta, no es el placer de la soledad voluntaria que uno busca como escape, es una soledad creada con pequeños ladrillitos de rechazo o silencio, de lejanía y extrañeza de todos los demás hacia ti.

En estos años puedo decir, sin una gota de cursilería, que he descubierto el amor. Entiéndase, por favor, que el amor no es un sentimiento rosa, blando y perfecto, no, es más bien algo visceral, lleno de complejas construcciones diplomáticas, potente y veloz aprendizaje y flexibilidad de carácter, es la forma más compleja y justa de guerra. Así, el amor, real, me ha permitido entender Annie Hall. Lo sé, es un hito raro, pero es MI hito. Annie Hall es ahora una película sobre la belleza de la flexibilidad del amor loco y real, la narración de una pareja perfecta incluso en sus profundas imperfecciones. Un amor así, no fijo como faro, sino flexible pero fiel, un amor así es el que deseo.

Jo.

Annie Hall and the love I want

Today I watched again Annie Hall after a couple of years. It was the favorite movie of one of my exs, I can still remember him begging me to watch it together, trying to explain how nice and special it was. Now it’s in theaters, is a replacement of art cinema or something like that. When I watched it years ago, i could only see an intelligent comedy about a neurotic men and a women quirky but funny. I fell in love with Woody Allen’s character, i felt identify with his bittersweet comments, his pessimistic view of life but always in the edge of a big laugh. But i didn’t notice anything at all, no magic. Is estrange and beautiful how much can one grown up in only two years, completely change paradigms, reformulate things that once were never-changing lighthouses of our existence. I used to fear solitude, despised strong relationships since it could only reflect with more power my fear of sudden and imposed loneliness. That’s my way of calling it, imposed loneliness. Have you ever have gone through the day (going out, work, eat, go back home, etc.) almost without pronouncing one word, so that, at night, it seems that your lips are sealed, with rheum, and the voice sounds distant, artificial? Well that is what i call imposed loneliness, no the pleasure of voluntary solitude that one seeks for escape, a loneliness built with little bricks of rejection and silence, of distance of everybody around you.

In this years i’ve got to admit that i’ve discovered love, without a drop of tawdriness. Please understand that love is not a pink feeling, soft and perfect, no, is rather strong and visceral, full of complex diplomatic constructions, powerful and fast learning, and flexibility of character, is the most complex and fair way of war. That’s how love, real love, let me understand Annie Hall. I know is a weird milestone, but it’s mine. Annie Hall is now a movie about the beauty of real and crazy love, the narration of a great couple, perfect, even in its imperfections. A love like that, not fixed, but flexible and loyal, is the one that I long for.

Jo.